No eligió bien el objetivo. La Policía Nacional detuvo días atrás en Son Banya a un ladrón, español de 40 años, poco después de robar un coche de empresa en el barrio palmesano de Son Cotoner que llevaba incorporado un GPS localizador. Los agentes, tras recibir el aviso de la propietaria, interceptaron al sospechoso en la entrada del poblado.
Los hechos, según fuentes judiciales, ocurrieron sobre las 16.00 horas en la calle Senyora Bonany. La dueña de una empresa avisó al 091 de que le habían sustraído un vehículo de la sociedad que tenía aparcado en la calle. Explicó a los agentes que el coche tenía incorporado un GPS localizador y les indicó la trayectoria que hacía el ladrón.
Las señales llevaron a los policías hasta el poblado chabolista de Son Banya. Allí prácticamente llegaron al mismo tiempo que el ladrón, que fue interceptado en la entrada. Al delincuente únicamente se le ocurrió decirle a los agentes que el coche lo había robado un amigo suyo y lo había mandado a por droga. No coló. Fue arrestado por un delito de hurto de uso de vehículo.