«Cómo voy a robar con 500.000 euros en el banco». Así se ha acogido al derecho a la última palabra un hombre de nacionalidad rumana acusado de desvalijar diversas casas en Son Vida durante un período de seis meses entre septiembre de 2016 hasta enero de 2017. En el juicio celebrado este jueves en la Audiencia Provincial de Palma, la Fiscalía pide para el sospechoso seis años de prisión por un delito de robo con violencia continuado en el tiempo y que indemnice a las víctimas por todos los objetos extraviados, que se eleva hasta los 86.000 euros.
El enjuiciado que ha aparecido de manera telemática al encontrarse encarcelado en Madrid, ha sido expulsado de la sala tras varias advertencias del magistrado tras intervenir en diversas ocasiones y reírse de una declaración de uno de los testigos citados para la causa. Minutos antes, se ha defendido de las acusaciones informando de que sus visitas a Mallorca eran «por motivos profesionales, soy jugador de póker profesional, no un ladrón».
A su vez, agentes de la Policía Nacional y la Policía Local de Calvià han declarado ante el tribunal que el detenido coincidía físicamente y en sus movimientos del delincuente que visionaron en las cámaras de seguridad de varias casas. Sin embargo, han coincidido en que ninguno fue capaz de ver la cara del ladrón ya que iba con un pasamontañas y tampoco confirmaron su identidad al no dejar huellas en el lugar de los hechos. En todo momento, los funcionarios han insistido en que el investigado era una persona muy ágil y con movimientos de «bailarín».
Según la investigación, el primer robo se produjo el 13 de septiembre de 2016 en un lujoso hotel de Son Vida. Tras entrar a través de una zona ajardinada y romper los marcos de las ventanas, entró en una habitación de la que se llevó 1.200 euros en metálico, un bolso Luis Vuitton cuyo precio ronda los 1.500 euros, dos brazaletes y un anillo de Cartier, dos pares de gafas de sol. Todo valorado en cerca de 11.500 euros. Los responsables del hotel reclaman una indemnización por los daños materiales ocasionados.
Tras el primer golpe, fue cambiando los objetivos y se centró en viviendas situadas en la misma zona. entró a un chalet y sustrajo 3.200 euros en efectivo, un Rolex y alhajas valoradas en más de 7.000 euros. Al comprobar el éxito de sus asaltos, siguió haciéndole, llegando a crear una colección de relojes de alta gama como Rolex, Cartier, Tag Heuer y Tissot.
Ante tales acusaciones, el hombre de 47 años ha explicado que en 2015 sufrió un grave accidente en Rumanía y ha acreditado un informe médico en el que se especifica su limitación de movilidad. «He ido en muletas durante todos estos meses. «Cómo voy a saltar muros y salir corriendo de la Policía así», ha ironizado ante los testimonios. Por su parte, los agentes que estuvieron en el caso aseguran que el día de su detención iba con la misma ropa que utilizaba el individuo investigado en Son Vida.