Un importante empresario alemán acusado de defraudar 21 millones de euros en el pago del IVA, durante la época de la Covid, ha sido detenido por la Guardia Civil en una finca de Sant Llorenç, donde se ocultaba. El acusado ha sido hospitalizado porque sufrió un problema de salud nada más ser arrestado y la Audiencia Nacional ha sido informada de su detención.
La Fiscalía de Munich llevaba un tiempo tras los pasos del potente industrial, que en los meses más duros de la pandemia llevó a cabo una intensa actividad comercial relacionada, al parecer, con la compra de material sanitario para hacer frente a la crisis sin precedentes que se había desatado.
Los investigadores descubrieron que en aquellos meses y años el empresario supuestamente dejó de pagar 21 millones en concepto de IVA en su país, lo que da una idea del volumen de negocio que generó. Cuando fue acusado de un delito fiscal, que conlleva penas de cárcel, el ciudadano alemán desapareció de Munich y la Polizei de su país comenzó a buscarlo.
Hace poco, los investigadores germanos dieron con una pista fiable que ubicaba al acusado en algún punto de Mallorca, un destino predilecto de muchos fugitivos de la Justicia alemana. El problema residía en saber dónde se escondía, por lo que los agentes realizaron nuevas pesquisas y finalmente, en colaboración con la Guardia Civil, descubrieron que estaba oculto en una finca del término de Sant Llorenç, donde llevaba una vida muy discreta y trataba de pasar desapercibido. El jueves, agentes de la Benemérita de Artà acudieron a la vivienda y procedieron a la detención del huido, que no ofreció resistencia.
El hombre, que tiene unos 60 años, empezó a sentirse mal poco después y fue ingresado en un centro hospitalario de manera preventiva, aunque podría recibir el alta en las próximas horas. El imputado ya ha contratado los servicios de un abogado palmesano, para intentar evitar la extradición a Munich, donde sería juzgado por defraudar 21 millones de euros.