Un helicóptero con dos personas a bordo ha caído esta mañana en la carretera M-40 de Madrid en un aterrizaje forzoso que ha partido el aparato ante la sorpresa de los conductores de una de las vías de circunvalación más concurrida a esa hora de la mañana, las diez y veinte. Pese al aparatoso siniestro, los ocupantes del helicóptero no han sufrido heridas de gravedad. Uno de ellos, incluso, ha salido por su propio pie de la aeronave y el otro ha tenido que ser rescatado por los Bomberos del Ayuntamiento.
Aun así, ambos han sido trasladados por el Samur-Protección Civil a un hospital con un traumatismo craneoencefálico leve uno de ellos y una posible fractura de fémur el otro. También ha resultado herido un conductor, cuyo vehículo ha sufrido el impacto de parte del fuselaje del helicóptero en el parabrisas y en una de las ventanillas. Los cristales le han provocado cortes leves.
Los bomberos han realizado un control de riesgos después de comprobar que no se había producido vertido alguno de combustible, mientras que la Guardia Civil se ha hecho cargo de la seguridad vial en la zona. Según ha informado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, la «pericia» del piloto del helicóptero, de color amarillo con matrícula F-HPUX, ha evitado males mayores, ya que ha conseguido hacer un aterrizaje forzoso en la mediana de la M-40, a la altura del kilómetro 5,500, cerca del Campo de las Naciones.
Por tanto, como ha subrayado el regidor, «prácticamente no ha afectado a los miles de vehículos que a esas horas transitan por esa zona tan concurrida». No obstante, la circulación se ha visto muy afectada al haber tenido que cortar al tráfico un carril por cada sentido para que los servicios de emergencias trabajaran y para facilitar la retirada del helicóptero cuando se estime.
Hasta el lugar se han desplazado efectivos de la Unidad Aérea de la Policía Nacional que se encarga de la investigación junto con los especialistas de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) del Ministerio de Transportes.
«Era un helicóptero que venía de una exhibición que se estaba haciendo en Ifema. Su destino era Cuatro Vientos. Sin perjuicio de que todavía no conocemos exactamente los detalles de lo que ha pasado, todo apunta a que la pericia del piloto ha evitado que no hubiera una tragedia mucho mayor», ha recalcado Martínez-Almeida. De hecho, esta semana se ha celebrado en Ifema la feria de aviación European Rotors, que cerró este jueves sus puertas tras cuatro días de actividad y que se presenta como una de las más importantes en el sector de la aviación en helicópteros y de las más grandes de Europa.