La defensa de Pau Rigo, el anciano juzgado por matar a uno de los ladrones que entraron en su casa en Porreres, reclama al TSJIB que acuerde su absolución. El abogado que representa al acusado, Jaime Campaner, ha formalizado su recurso contra el auto en el que la magistrada que presidió el fallido juicio con jurado ordenaba que este se repitiera. Considera que esta decisión, «a pesar de no hallarse exenta de buenas intenciones, no puede mercer la convalidación» del tribunal dado que se produce cuando, considera que se debió dictar una sentencia absolutoria.
El primero de los argumentos de la defensa es que no existió un «error» en el veredicto, como sostuvo la Fiscalía al reclamar la repetición del juicio: «Estamos ante una cuestión puramente aritmétcia, cinco votos no alcanzan los siete legalmente exigidos para estimar la culpabilidad». Así, reprocha a todas las acusaciones que no formularan pega alguna cuando estaban a tiempo de hacerlo, en el trámite en el que se validó el veredicto del jurado. Considera que ahí perdieron su oportunidad para intentar protestar contra el veredicto. «En los actos orales todas las partes tienen la oportunidad de actuar y deben hacerlo para solicitar entonces cuanto a sus intereses convengan». Señala que, de admitir esa posibilidad se premia el fallo de las acusaciones en contra al derecho de defensa.
El escrito de apelación ante el TSJIB insiste en que «una vez disuelto el jurado con la absoluta aquiesciencia de todos los intervinientes, no puede declararse, como por arte de birlibirloque, una nulidad de actuaciones que se aparta de la legalidad». Considera que, un nuevo juicio sería negarle el derecho a tener una sentencia fundamentada y vulneraría derechos fundamentales. Así, en primer lugar pide al TSJIB que anule el auto de la presidenta del jurado y le obligue a dictar una sentencia absolutaria. Como petición subsidiaria pone encima de la mesa que solo se repita el juicio para Rigo en solitario.
El jurado, celebrado hace un mes, terminó en un fiasco. La magistrada dio por bueno un pronunciamiento condenatorio que reconocía una eximente incompleta para el anciano. Esto es, le negaba haber actuado en legítima defensa. Sin embargo, lo hizo como si fuera una proposición favorable para el acusado, lo que requiere solo cinco votos del jurado y no siete. La Fiscalía, a partir de ahí, pidio que se declarara la nulidad del juicio sin sentencia y que se repitiera este, que fue la solución por la que se decantó la magistrada al considerar lo ocurrido una nulidad de base.
El argumento de la Fiscalía es que el objeto de veredicto no permitía conocer en realidad cuál era la opinión del jurado sobre el crimen de Porreras: Si Rigo disparó y mató a Mauricio Escobar alterado por el asalto o bajo una amenaza tal que justificaba el uso del arma por legítima defensa. Ahora la repetición o no del juicio dependerá de lo que diga el Tribunal Superior de Justicia.