El juicio al exjuez Manuel Penalva y el exfiscal Miguel Ángel Subirán continúa la mañana de este miércoles con la declaración, entre otros, de dos testigos protegidos. La sostiene que los acusados manipularon lo que uno de ellos dijo en instrucción para poder acusar de cohecho a un policía local de Palma que ingresó en prisión preventiva durante la investigación. Hasta ahora, la mayor parte de la prueba personal que se ha celebrado ha girado en torno a los delitos de revelación de secretos.
En la sesión de ayer declaró el abogado de Bartolomé Sbert durante la instrucción, que denunció la revelación de datos del sumario. Antonio Martínez también sostuvo que fue objeto de presiones por parte del juez Penalva que sacó la pistola y la colocó encima de la mesa durante una conversación entre ambos.
Termina la sesión
Termina la sesión del día. Las defensas han renunciado a la declaración de cuatro policías nacionales previstos para mañana, por lo que no habrá juicio este jueves.
Rodríguez y Gijón
La testigo, que trabajaba como prostituta, ha negado que reconociera en sus declaraciones a José María Rodríguez y a Álvaro Gijón en una fiesta. «No puedo acordarme de lo que ocurrió porque había consumido mucho». Desliza que su declaración «pudo ser manipulada» y alude a presiones.
Otra testigo protegida
Ahora es el turno de otra testigo protegida.
"Imaginado"
El tribunal revisa la declaración de ese testigo y su discusión con Subirán. El testigo discutía que dijo que «imaginaba» pero que no sabía para quién era el dinero.
"Jamás dije que el dinero fuera para Carlos Vallecillo"
El testigo insiste en que nunca dijo que un sobre con dinero del Grupo Cursach fuera para un policía en concreto.
Sobre
Declara que le insistían por un sobre si era o no para un policía local y que eso se incluyó en la declaración. Dice que no sabía para quién era.
"Había palabras que yo no había dicho"
Un antiguo testigo protegido afirma que se negó a firmar su declaración ante Penalva y Subirán porque se incluyeron cosas que él no había dicho.
Custodia del móvil
Las defensas ponen en duda la cadena de custodia del teléfono de Blanca Ruiz.
Móvil de Iván
El inspector de la científica dice que los archivos del móvil de Iván Bandera estaban completos y que los chats aún estaban en el terminal a pesar de haber sido eliminados.
Policía científica
Declara un inspector de la Policía Científica para acreditar la custodia del teléfono de la policía Blanca Ruiz, donde también se encontraron los chats.
Nadie fue a por los documentos
Ferrer cuenta que custodió todo el expediente y que llamó a Subirán para dárselo al ver que nadie acudía. «Entendí que se habían dejado una parte importante de la investigación».
Declaraciones "en contra"
Ferrer insiste en que Subirán le pidió técnicos que declararan «en contra» de forma explícita. Le ofreció primero a la directora general, pero el fiscal lo rechazó y luego a los dos más antiguos del departamento aunque no tenían conocimiento directo del contrato de la ORA.
Testigos "en contra"
Ferrer admite que Subirán le pidió que le diera nombres de técnicos para que declararan «en contra» de los detenidos.
Documentos custodiados
«No se personó nadie a revisar los ordenadores ni los despachos». Ferrer cuenta que cerró todos los despachos y que se hizo con toda la documentación pero que nadie se lo pidió. La prisión del funcionario se justificó por riesgo de destrucción de pruebas.
Interrogatorio
Cuenta que Subirán le preguntaba por unos parquímetros nuevos que sostenía que faltaban: "Preguntas muy insistentes con los parquímetros. El señor Subirán insistió mucho en que no estaban. Le animé a salir a la calle porque los que se habían renovado eran los de Via Alemania".
Facturación de horas de más
Ferrer niega que dijera que se facturaban horas de más por parte de la empresa de la ORA al Ajuntament.
Perjuicio económico
Ferrer insiste que llamó a Subirán para ofrecer documentos sobre la ejecución del contrato. En el auto de prisión del funcionario municipal, consta que estaba prevista su declaración para aportar datos sobre el perjuicio económico.
Declaración voluntaria
Ferrer dice que llamó a Subirán para aportar documentación del 'caso ORA' en torno a la ejecución del contrato y también para informar de quejas que le habían llegado de dos trabajadores.
Exconcejal
Declara ahora el antiguo concejal de Mobilitat de Palma, José Luis Ferrer.
Seguimientos
«Doña Blanca me hacía seguimientos con el señor Iván con un Seat León. Lo se porque los veo».
Incidente en la rampa
El policía responde a preguntas por un incidente durante las primeras detenciones de agentes que hubo en el caso y una supuesta coacción en la rampa de los juzgados a la magistrada que entonces intervenía y a Subirán. Dice que se abrió una investigación judicial y que se concluyó que no había ocurrido nada.
Ingresos en prisión
El policía ingresó tres veces en prisión. "Ha sido traumático. Tres ingresos en prisión, tres detenciones".
Miedo
El testigo: "Claro que tuve miedo. Cuando salgo de prisión, un compañero me dice, vete del Coll, que se que te van a tender una trampa. El Ico me lo enroscaron, se puso a vivir al lado de mí. Me fui de allí a vivir a Algaida, denuncié unas amenazas en el suelo: 'Jaime estás muerto'. Tuve miedo".
"Estaba obsesionado"
«Subirán estaba obsesionado con Gijón y el PP», dice el testigo.
"El objetivo era Gijón"
«Estaban obsesionados con Álvaro Gijón. El ofrecimiento era que si firmaba contra Gijón me iba a mi casa. Cada vez que bajaba al calabozo, el policía Iván Bandera me lo decía».
Se retoma la sesión
Se retoma la vista, el fiscal renuncia al testigo Arturo Segade, extrabajador del Grupo Cursach que estuvo en prisión. No podía declarar por una huelga de funcionarios. Es el turno del policía local, Jaime Garau.
Ausencia y huelga
La siguiente testigo no comparece. El fiscal pide que se la intente localizar. Al que le toca declarar después tiene que comparecer por videoconferencia. Hay problemas porque el funcionario de los juzgados de Ciudad Real que hace las conexiones parece ser que está de huelga. Por ese motivo, la sesión se suspende hasta las diez y media.
Testigo coaccionada
La primera testigo relata que declaró durante la instrucción del caso y que fue presionada para que reconociera que sabía algo de un prostíbulo en la calle Catalunya de Palma que, en realidad, no funcionaba como tal. La defensa de Penalva y Subirán protesta porque estos hechos no forman parte del procedimiento.