Se paseaba por bares de Sa Pobla, Santa Margarita y Petra asegurando que era empleado del Consell de Mallorca y ofreciendo puestos de trabajo con un salario de entre 1.200 y 1.500 euros mensuales. Para acceder a estos presuntos puestos de trabajo los interesados debían abonarle 150 euros que en teoría iban destinados a un curso. Todo era mentira y más de 30 personas fueron estafadas. Un hombre ha aceptado este martes en la Audiencia de Palma una condena de un año de prisión por estos hechos. También deberá devolver los 150 euros que le abonaron cada una de las víctimas e indemnizar con 1.500 euros al Consell.
Fiscalía, y la acusación particular han llegado a un acuerdo con el letrado del acusado antes del inicio del juicio. El pacto ha supuesto una rebaja de nueve meses de prisión respecto a la pena que inicialmente solicitaba el Ministerio Fiscal. El Tribunal también le ha concedido la suspensión de pena siempre y cuando no delinca en un plazo de cinco años y afronte los pagos de las indemnizaciones durante el próximo año.
Los hechos ocurrieron en los meses de febrero, marzo y primera mitad de abril de 2015 cuando en los bares de las localidades anteriormente mencionadas, y haciéndose pasar por trabajador del Consell de Mallorca, el procesado estuvo ofreciendo empleos en dicha institución. Los puestos eran para el desbrozo y limpieza de caminos y cunetas. Para la supuesta tramitación del papeleo previo a la firma de los respectivos contratos, solicitaba a los interesados una fotocopia del D.N.I., fotocopia de la tarjeta de la Seguridad Social, fotocopia de la tarjeta del paro y el abono de 150 euros que irían destinados al desarrollo de un curso a fin de obtener el carnet habilitante para el trabajo en carreteras. La firma de los contratos nunca llegó.