‘El Ico' y el testigo protegido 16 acumulan ya peticiones de cárcel que suman 19 años para cada uno por mentir en la instrucción del ‘caso Cursach' y provocar así el ingreso de agentes de la Policía Local en prisión. Una vez que el juez cerró el caso y concluyó que existían indicios de falso testimonio y de detención ilegal, por el momento han sido dos las acusaciones particulares que han presentado sus escrito de calificación. Ambos responden a agentes que ingresaron en la cárcel a partir de declaraciones de ambos testigos, uno de ellos tras los careos a los que el juez Manuel Penalva sometió a un grupo de agentes en febrero de 2016.
El primero de los escritos se centra en el ingreso en prisión del policía José Antonio Manzanares, que pasó por un careo con el hijo de ‘La Paca'. Este agente, durante los años 2005 y 2010 trabajó en la Escuela Balear de Administración Pública. Sin embargo, fue implicado por ambos testigos protegidos, quienes le atribuían estar en la Patrulla Verde y actuar en una retahíla de supuestos delitos. La causa se archivó para él a pesar de que había pasado dos meses en prisión preventiva en el año 2016, en el momento más duro del caso para los policías locales. Su acusación recoge que el 16 declaró en un total de cinco ocasiones ante el Grupo de Blanqueo de la Policía Nacional yen el juzgado de instrucción. En las primeras siempre incluía a este agente. En la que hizo en 2018, cuando la causa ya no la dirigía el juez Penalva, nada dijo de este agente. Algo similar ocurre en torno a este testigo en la otra calificación, que representa a tres policías locales declarados inocentes tras el juicio del ‘caso Cursach'.
Los tres estuvieron en prisión preventiva durante meses y las declaraciones de los dos testigos protegidos fueron básicas para que el juez Penalva tomara esa decisión. ‘El Ico' se hizo en 2015 con el traspaso de una discoteca, ‘El Cavalli', sobre la que había una orden de clausura. El dueño anterior le ocultó el dato. Cuando estalló el caso, fue uno de los infractores que acudieron de forma voluntaria al Grupo de Blanqueo a asegurar que habían sido acosados por la Patrulla Verde. Durante la instrucción por falso testimonio y detención ilegal, ninguno de los dos acusados ha declarado. El TSJIB archivó en torno al juez Penalva, al fiscal Subirán y a los policías de Blanqueo el caso en torno a estas denuncias.
El apunte
La mujer que se puso pegamento en la vagina
Las acusaciones mantienen cargos por detención ilegal según una sentencia firme: la que condenó a diez años a una mujer que denunció en falso a su expareja por violación y dijo que le puso pegamento en la vagina. Otros testigos protegidos del ‘caso Cursach’ afrontarán cargos similares y elevadas peticiones de cárcel. Son seis los que tienen causas abiertas en distintos juzgados de instrucción, como la madame o el antiguo testigo protegido 29.