Han pasado cuatro años desde el fallecimiento del comandante José Domingo, pero su recuerdo sigue muy vivo en la Guardia Civil de Mallorca. Este viernes, medio centenar de compañeros, amigos y familiares rindieron un sentido homenaje al añorado exjefe de la Agrupación de Tráfico que murió a los 42 años y que ha dejado una impronta imborrable en la Benemérita.
El acto se celebró en el restaurante Toni y Curro, del polígono de Son Oms, y fue organizado por la Asociación de Amigos de la Guardia Civil (AAGC). El presidente de la entidad, Fernando Extremera, ensalzó emocionado la figura de Domingo, en presencia de su viuda, Merche, de uno de sus hijos y de los padres del fallecido. El homenaje no será un acto aislado y la AAGC tiene la intención de honrar a otros guardias civiles de Mallorca que han perdido la vida recientemente.
A la comida de ayer acudieron, entre otros, el coronel Jaume Barceló, jefe de Emergencias del Govern Balear; el teniente coronel Francisco Martínez, segundo jefe de la Comandancia de Baleares; y los comandantes Manuel Aguilera, de Tráfico, y Pedro Monleón. Los compañeros del mando fallecido entregaron a la familia una placa y a la hora de los discursos destacaron la calidad humana y profesional del comandante, que en 2011 se convirtió en uno de los mandos más jóvenes de España.
Francisco José Domingo González nació en Calvià, en 1976, y desarrolló la práctica totalidad de su carrera en las islas, a donde fue destinado como teniente en la Policía Judicial. Participó también en misiones de paz en Afganistán, en 2006 y en el Líbano, en 2008. Domingo siempre mantuvo una inmejorable relación con los medios y fue un firme partidario de la libertad de prensa.