En el pecado va la penitencia. Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre por quebrantamiento de medida cautelar y a una mujer, por lesiones. Los hechos se remontan a la madrugada del sábado cuando una patrulla estaba realizando una ronda cerca de la calle Sindicato de Palma y fueron requeridos por un hombre. Dicho varón les indicó que, instantes antes, había sido agredido por una mujer.
En su declaración inicial, el varón apuntó que ella le había propinado un puñetazo en el ojo y que, acto seguido, le había asestado un botellazo con una botella de vidrio en la mano. A consecuencia del fuerte impacto, la botella se fracturó provocando lesiones de consideración teniendo que ser atendido de varias heridas sangrantes y contusiones. Los funcionarios policiales se entrevistaron con ambas partes y al pasar la filiación (identidad) por la base de datos policial, la sala del 091 informó que el acusado tenía una orden de alejamiento en vigor de la supuesta agresora.
Tras realizar las correspondientes comprobaciones, se procedió a la detención del hombre por un delito de quebrantamiento de condena. Del mismo modo, también se arrestó a la mujer por un delito de lesiones graves. Lo más curioso es que a los dos integrantes de la pareja en cuestión les constan numerosos antecedentes policiales por hechos similares y otros distintos. Horas más tarde, una vez confeccionado el correspondiente atestado policial, la pareja fue puesta a disposición judicial en los juzgados de guardia de Vía Alemania.