Un hombre, de nacionalidad española y 45 años de edad, fue condenado este miércoles al pago de una multa de 300 euros al declararse autor de un delito de hurto continuado. Reconoció ante la jueza que en julio del año pasado sutrajo gasolina de tres vehículos que se encontraban estacionados en un centro comercial de Palma. El acusado tendrá que indemnizar a los perjudicados, además de por el combustible robado, por los desperfectos ocasiondos en el depósito.
Los hechos tuvieron lugar los días 19, 22 y 24 de julio. El acusado acudió en distintas horas, pero siempre a plena luz del día, al parking subterráneo del centro comercial y ayudado de una manguera sustrajo decenas de litros de tres vehículos que allí se encontraban estacionados. Para conseguir su objetivo ocasionó distintos daños en los mismos. Lo sucedido fue denunciado ante la Policía Nacional, que inició una investigación.
A través de las cámaras de seguridad comprobaron que se desplazaba en un vehículo, que resultó ser de sustitución facilitado por un taller de la capital balear. El día 5 de agosto, y tras unas complicadas pesquisas, fue arrestado por los agentes. Inicialmente la Fiscalía solicitaba para el imputado dos años y medio de cárcel, pero tras el acuerdo de su defensa, ejercida por el abogado Andreu Bosch, la pena quedó fijada en una multa de 300 euros. Asimismo tendrá que abonar 363 euros a los perjudicados. La jueza dictó sentencia 'in voce'.