Un hombre y dos menores han sido detenidos por la Policía Nacional acusados de dirigir una patera con 14 inmigrantes a bordo interceptada el pasado 26 de abril en aguas de la isla de Cabrera, al sur de Mallorca. Agentes de la Policía Nacional en Palma han detenido a un hombre de origen argelino de 30 años, así como a dos menores, como presuntos autores de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, ha explicado el cuerpo policial este lunes en una nota. Sobre las ocho de la mañana del pasado 26 de abril, agentes de la Guardia Civil rescataron en alta mar una embarcación tipo patera con 14 personas a bordo, que fueron trasladadas al puerto de Palma, donde recibieron atención por parte de la Cruz Roja y fueron puestos a disposición de la Policía Nacional para realizar los trámites relacionados con la Ley de Extranjería.
Una vez en dependencias policiales, los agentes del Grupo IV de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras tramitaron los expedientes de devolución por entrada ilegal en territorio nacional e iniciaron una investigación en coordinación con la Guardia Civil. Los agentes identificaron como patrón de esta patera a un hombre de 30 años y averiguaron que dos menores, que inicialmente argumentaron ser mayores de edad, también habían dirigido la embarcación desde Argelina hasta aguas de Baleares. Tras su detención, los dos jóvenes fueron sometidos a pruebas oseométricas en un centro hospitalario en Palma, siendo considerados menores de edad, por lo que quedaron a disposición de la Fiscalía de Menores e ingresaron en un centro de menores. El detenido mayor de edad pasó a disposición judicial, decretándose prisión provisional para el mismo.
El cuerpo policial ha recordado que este tipo de travesías suelen durar más de 24 horas y ponen en serio peligro la vida de las personas que se arriesgan a protagonizar esos viajes, ya que la línea de flotación se ve sobrepasada con facilidad y, en este caso, los pasajeros carecían de chalecos salvavidas suficientes, radio, bengalas o cualquier otro sistema de localización, así como reservas de víveres y agua suficiente. Esta embarcación solo disponían de un motor de escasa fiabilidad y potencia, sin motor auxiliar, y algunos de los pasajeros llegaron a fumar a bordo, según la Policía Nacional. Los pasajeros suelen pagar entre 700 y 2.000 euros por travesía. En lo que va de año han llegado 20 pateras al archipiélago con 345 inmigrantes a bordo, según el recuento, mientras que en 2022 fueron detectadas en las costas de Baleares 174 embarcaciones irregulares con 2.570 ocupantes, de acuerdo a los datos del Ministerio del Interior.