La Policía Nacional ha visualizado las cámaras de seguridad la iglesia de Sant Miquel para localizar al presunto autor del intento de robo de la corona del niños Jesús. En las imágenes se aprecia cómo el ladrón, ya identificado, accede a la capilla y se introduce por debajo del cristal que blinda a la Mare de Déu de la Salut y el niño Jesús e intenta llevarse la corona.
El sospechoso, un joven con barba y melena larga de color castaño, tiene 30 años y es de origen sudamericano, que ya había robado en otros dos comercios de la zona.
Los hechos sucedieron el pasado viernes a las 14.30 horas cuando un feligrés vio que un hombre manipulaba la corona. El delincuente huyó sin llegar a robarla. «Lo único que hizo fue destrozarla», dice el párroco de la iglesia Toni Gómez.
La Mare de Déu de la Salut y el niño Jesús lucen ahora coronas de plata hasta que se restaure la que trató de llevarse el ladrón. «Nadie le podría haber comprado esa pieza por el valor que tiene», asegura. «No se llevó nada, pero hizo unos destrozos a una imagen de un valor sentimental e histórico. Según la tradición, era la que llevaba en su camarote el rey Jaume I cuando llegó a Mallorca. Es la figura más importante que hay en toda Palma», explica Gómez.