Un equipo especial de investigación policial de Corea del Sur ha allanado la Agencia de Policía Metropolitana de Seúl, la comisaría del distrito de Yongsan, así como otras seis oficinas policiales, como parte de una investigación por la «insolvente» respuesta policial a la estampida humana en una fiesta de Halloween en Seúl. Las redadas se han producido tan solo un día después de que la Agencia Nacional de Policía admitiera que llegaron 11 llamadas de emergencia que alertaban sobre el hacinamiento en el barrio Itaewon, todo ello cuatro horas antes de la aglomeración mortal y sin que tales advertencias repercutieran en medidas, según ha informado Yonhap.
Los ocho lugares allanados también incluyen la oficina policial del distrito de Yongsan, la Sede Metropolitana de Bomberos y Desastres de Seúl, la estación de bomberos de Yongsan y la sede del Metro de Seúl, según han detallado las autoridades. El último informe de la Sede Central de Medidas de Seguridad y Desastres surcoreano elevó a 156 los fallecidos y a 151 los heridos como consecuencia de la estampida humana que se desarrolló en la noche del sábado durante una celebración de Halloween en el barrio de Itaewon, en Seúl.
Hasta el momento, un total de 55 hombres y 101 mujeres han perdido la vida como consecuencia de este suceso, la mayoría tenían entorno a 20 años, aunque una decena de muertos superaban los 40, según han informado las autoridades y ha recogido la agencia de noticias Yonhap. Una gran concentración de personas en un estrecho callejón de apenas cuatro metros de ancho muy cerca del Hotel Hamilton, con una pendiente que formaba una cuesta abajo, generó que las personas comenzasen a caer unas sobre otras, por lo que cientos de personas reportaron dificultades respiratorias y 45 fallecieron en el acto.