La Policía Nacional ha detenido en Palma a dos hombres, de 26 y 34 años, por secuestrar a un joven para robarle. Los arrestados están acusados por delitos de detención ilegal y robo con violencia. Los hechos se produjeron a primeros del mes de julio. La víctima denunció que en la madrugada del pasado día 3 de ese mes se encontraba de fiesta y coincidió con un conocido a quien invitó a una consumición. Entonces apareció otro hombre, amigo del anterior y a quien no conocía de nada. Empezaron a beber y el hombre desconocido empezó a insultar al joven insistiendo en que le invitara, según ha informado la Policía Nacional este sábado en una nota de prensa.
Posteriormente salieron fuera del establecimiento y se introdujeron en el coche de uno de los ahora arrestados. Los delincuentes bloquearon las puertas y uno de ellos empezó a agredir al joven exigiéndole que le entregara dinero, por lo que la víctima le dio todo lo que llevaba en la cartera. A continuación, el asaltante obligó a la víctima a desbloquear el móvil para que le enviara dinero desde la aplicación de su banco. El joven bloqueó el acceso a la app y provocó que el hombre desconocido volviera a agredirle exigiéndole más dinero. Los dos delincuentes iniciaron la marcha del vehículo dirigiéndose a una casa a la que llevaron al joven en contra de su voluntad. En la vivienda sentaron a la víctima en un sofá y uno de los hombres sacó un dispositivo de defensa eléctrica con el que apuntaba al joven mientras lo accionaba. El otro individuo le dio un manotazo exigiéndole que abriera la aplicación bancaria en el teléfono para el envío de dinero. El joven relató que llegaron incluso a mostrarle una navaja con la que le amenazaron tras propinarle varias bofetadas. Después salieron del domicilio y se dirigieron a un banco para que sacara dinero. Los dos hombres se quedaron fuera esperando a que el perjudicado saliera con el dinero, pero el joven aprovechó esa circunstancia para, de forma discreta, pedir ayuda a un empleado diciéndole que llamara a la policía. En ese momento los dos hombres abandonaron el lugar.
Una patrulla policial se personó en la sucursal y auxilió a la víctima, que denunció lo ocurrido. El grupo de Atracos de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y tras llevar a cabo numerosas gestiones consiguieron identificar a los dos hombres a finales del pasado mes de septiembre y los detuvieron. Uno de los investigados ya fue detenido el año pasado como presunto autor de unos hechos similares tras la denuncia interpuesta por otra víctima que indicaba que fue extorsionada recibiendo amenazas. El hombre se vio obligado a pagar unos dos mil euros por temor a ser agredido o que pudiera sufrir algún daño.