La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil intensifica esta semana el número de controles en las carreteras de Baleares. Lo hace en colaboración con la Dirección General de Tráfico y colabora con ROADPOL (European Roads Policing Network). Se trata de una campaña de seguridad vial que arrancó ayer y que finalizará el próximo jueves 22, coincidiendo con la Semana Europea de la Movilidad. La Benemérita dio ayer el pistoletazo de salida del operativo balear con un amplio dispositivo policial montado en la rotonda de s'Esgleieta, en el término municipal de Esporles. Una decena de agentes del instituto armado montaron un control de velocidad, documentación y detección de irregularidades al volante.
Para ello, contaron con la colaboración del ‘mini Pegasus', uno de los drones de la DGT operado por la Guardia Civil. Durante algo más de una hora, los guardias no cesaron de parar y multar a decenas conductores infractores. Falta de seguro obligatorio, carecer de la ITV en vigor, conducir hablando con el teléfono móvil, no utilizar el cinturón de seguridad o las distracciones al volante. Todo ello, sumado a las multas de exceso de velocidad detectadas por un radar móvil.
‘Mini Pegasus', en acción.
El proyecto fue anunciado oficialmente el pasado mes de mayo y tiene como objetivo reducir las muertes en carretera en Europa, intentando lograr los 0 fallecidos. Los organizadores tienen previsto contabilizar y reportar las cifras de víctimas mortales en carretera de todos los países participantes. Durante toda esta campaña se llevarán a cabo diferentes acciones de comunicación basadas principalmente en actividades de prevención que llevarán a cabo cada una de las fuerzas nacionales de policía de tráfico. Fueron muchos los conductores que se llevaron una desagradable sorpresa cuando se percataron de que habían sido grabados por ‘mini Pegasus' desde el aire y que las imágenes en poder de la Benemérita eran pruebas irrefutables para demostrar sus infracciones.