Un hombre que asaltó una farmacia de Son Rapinya armado con un cuchillo aceptó este viernes una condena de un año y dos meses de cárcel. La jueza tuvo en cuenta la eximente incompleta de alteración psíquica ya que el acusado, de 51 años, sufría un trastorno por su grave adicción al alcohol. El atraco se produjo sobre las 19.20 horas del pasado 22 de abril en una farmacia situada en el Camí de Son Rapinya, en Palma. El hombre entró en el establecimiento con gafas de sol y la capucha de su sudadera puesta. «Esto es un atraco», le dijo a la empleada del establecimiento mientras esgrimía un cuchillo.
El delincuente exigió a la mujer que le entregara el dinero de la caja y la trabajadora, asustada, se introdujo rápidamente en la trastienda y después salió a la calle para pedir ayuda a gritos. El atracador huyó de la farmacia a la carrera, pero varios jóvenes que se encontraban en la zona y que oyeron los gritos de auxilio de la empleada lo persiguieron hasta un domicilio cercano donde se refugió el enjuiciado. Una patrulla de la Policía Nacional se desplazó de inmediato hasta el lugar y en cuestión de minutos localizaron al delincuente con la ayuda de los vecinos.
La Fiscalía reclamaba al inicio del proceso judicial una condena de dos años y siete meses de prisión para el hombre pero ayer su abogado defensor llegó a un acuerdo con el representante del Ministerio Público y rebajó su petición a un año y cuatro meses. El acusado, que se encuentra encarcelado, se declaró autor de un delito intentado de robo con intimidación y uso de armas.