Tiene 97 años y está acusado de agredir sexualmente a su vecina en Campos. La Fiscalía reclama una condena de tres años y medio de cárcel para el hombre y una multa que asciende a 900 euros. Además, tendrá que indemnizar a la víctima con 2.158 euros por los daños morales y las lesiones ocasionadas. Los hechos por los que le acusa el Ministerio Público ocurrieron el 16 de noviembre sobre las 17.30 horas. El nonagenario, según el relato de la Fiscalía, llamó al timbre del domicilio de su vecina y, tras cerciorarse de que estaba sola en casa, la agarró fuertemente de los brazos y comenzó a darle besos por la cara.
El hombre llegó a darle mordiscos en las mejillas y a pedirle que ella hiciera lo mismo, que le besara y que le tocara los pechos y los genitales y que se fuera a la cama con él. Ante la negativa de la mujer, el acusado la cogió por el cuello y le dijo que si no le besaba la iba a matar. Finalmente la denunciante consiguió zafarse del acusado advirtiéndole que iba a llamar a la policía. A consecuencia de la agresión, la víctima sufrió un hematoma en la mejilla derecha y un ataque de ansiedad.
El juicio se señaló tiempo atrás en un juzgado de Palma, pero se suspendió porque el abogado defensor del investigado solicitó que se le practicara un examen médico forense para determinar si, a su edad, podía ser enjuiciado. El informe determinó que no estaba capacitado para afrontar una vista oral, pero la Fiscalía solicitó que complementaran la resolución del facultativo.