El Ministerio Fiscal solicita un año de prisión para un hombre acusado de dar un puñetazo en la boca a un conductor de autobús en Cala Rajada en agosto del pasado año. Asimismo la acusación pública también pide que el imputado, de nacionalidad española, indemnice a la víctima en 520 euros por el tratamiento odontológico que siguió para reparar el daño sufrido en una pieza dental. El juicio por estos hechos está previsto que se celebre próximamente en una sala de lo Penal de los juzgados de Vía Alemania, en Palma.
Los hechos, según el relato de la Fiscalía en su escrito de acusación, tuvo lugar el 22 de agosto de hace ahora un año sobre las 10.00 horas en la Plaza de los Pinos de Cala Rajada, en Capdepera. El perjudicado se encontraba descargando el equipaje de turistas del maletero del autobús privado que conducía. En un momento dado pasó un coche por su lado y le golpeó levemente. Unos metros más adelante, el coche se detuvo. Y de él se bajó el procesado, de 30 años de edad. Pero no para interesarse por su estado, sino que al acercarse a él y sin mediar palabra le propinó un puñetazo en la boca al chófer profesional, que terminó en el suelo tras el golpe.
El hombre sufrió una herida en el labio, que requirió puntos de sutura. Además, tuvo que recibir tratamiento odontológico posterior, por movilidad leve en uno de los dientes, cuyo coste ascendió a 520 euros. La víctima reclama al acusado dicha cantidad, ya durante la fase de instrucción ya fue indemnizado por las lesiones causadas.