El cuerpo sin vida de un ciudadano holandés de 54 años, que llevaba casi tres décadas viviendo en la Isla, ha aparecido a primera hora de este jueves en la calle Singladura de Can Pastilla, en Palma. A pesar de los intentos de los sanitarios por recuperar a la víctima no han podido más que certificar su defunción.
El aviso de alarma lo ha dado una vecina minutos antes de las 6.00 horas al ver al hombre, un indigente que llevaba días pernoctando por la zona, tirado en el suelo y que no respondía a los estímulos. Minutos más tarde han llegado al lugar una patrulla de la Policía Nacional y una ambulancia medicalizada.
Los sanitarios han estado durante varios minutos intentando reanimarlo sin éxito. Según fuentes próximas al caso, el neerlandés llevaba dos días durmiendo en un banco próximo de donde ha sido encontrado muerto y rechazó alimentos y bebida que le portaban los residentes de la zona. La autopsia revelará el motivo del deceso.