La Audiencia de Palma juzgará el viernes que viene a un acusado de tentativa de asesinato y de homicidio, malos tratos y lesiones para quien la Fiscalía pide 25 años de prisión, por intentar matar a su expareja con un cuchillo y por amenazar de muerte e intentarlo también con un vecino, al quien creía su amante. Los hechos que juzgará un tribunal de la sección segunda de la Audiencia ocurrieron el 9 de octubre de 2020 en una vivienda de Palma, cuando el hombre, de 48 años, impidió a su expareja salir a pasear, y la agredió a puñetazos y a patadas, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía. Tras la agresión, cogió de la cocina un cuchillo de gran tamaño y amenazó con matar a su expareja y también a un vecino al que consideraba su amante.
Se dirigió a casa de dicho vecino, llamó reiteradamente y, cuando el hombre abrió la puerta, se abalanzó sobre él esgrimiendo el cuchillo, con intención de clavárselo en el cuello y gritando que iba a matarlo. El hombre logró esquivar la puñalada y, con la ayuda de su compañero de piso, consiguió volver a cerrar la puerta de la vivienda. Como relata la Fiscalía, el supuesto agresor regresó entonces al domicilio que compartía con su exmujer. Con la finalidad de sorprenderla y acabar con su vida, entró por la terraza de un patio interior, tras saltar una verja, y le clavó el cuchillo por la espalda. Una vez ella estaba en el suelo, intentó volver a clavarle el cuchillo, a la vez que gritaba que iba a matarla, pero no lo consiguió porque se interpusieron su hijo y su nuera.
Desde hacía años, la mujer sufría agresiones físicas y verbales del acusado que no aceptaba el final de su relación sentimental. Tras ser detenido, cuando era conducido al furgón policial, al ver en las proximidades al vecino al que había intentado agredir en un principio, el hombre lo amenazó de nuevo de muerte. La Fiscalía pide que sea condenado a 14 años por el delito de asesinato en grado de tentativa, con las circunstancias agravantes de parentesco y de violencia machista. También solicita que cumpla 6 años más por el delito de tentativa de homicidio, 2 años por malos tratos, 1 año por el delito de lesiones y a otros 2 años por amenazas graves. Además, la acusación pública pide que se le prohíba portar armas durante 7 años, así como comunicarse o acercarse a menos de medio kilómetro de su ex durante 32 años, y al vecino que amenazó, por otros 4 años. La acusación pública solicita que el presunto autor de los hechos indemnice con 1.000 euros a su expareja por los daños morales. El juicio, que estaba previsto que se celebrara el pasado marzo, será el viernes que viene ante la sección segunda.