La Policía Nacional ha informado este martes de la detención de dos varones, de origen magrebí y de 43 y 44 años, como presuntos responsables de 12 hurtos cometidos entre finales de marzo y comienzos de mayo en distintos aparcamientos comerciales de la ciudad. Según han indicado, los detenidos aprovechaban que las víctimas estaban cargando la compra para robarles. En concreto, los robos tuvieron lugar en el polígono de Son Malferit y en el complejo comercial de Es Coll d'en Rabassa, así como en Son Morro y en una gasolinera de Foners, según acredita una «extensa investigación» del Grupo de la Comisaría de Distrito Centro.
La mecánica de los detenidos era acudir en la furgoneta de uno de ellos a estos lugares y esperar a que algún cliente saliera del comercio y al introducir la compra en el vehículo, aprovechar el momento en que dejaban un bolso, mochila o cartera a la vista para abrir «sigilosamente» una de las puertas delanteras, «apoderarse» de esos objetos y huir. En una ocasión, abordaron a una mujer a la que le ofrecieron ayuda para cargar con la compra, y «en un descuido» le robaron dos teléfonos. Las víctimas han sido mayoritariamente mujeres de mediana edad, aunque, según la Policía, en una ocasión le robaron el teléfono a un varón extranjero utilizando el mismo método.
Uno de los sospechosos era «un conocido» de la Comisaría de Distrito Centro, responsable de buena parte de las casi 30 detenciones que acumula por hechos diversos, desde delitos contra la seguridad del tráfico, lesiones graves, así como robos con violencia como un tirón de bolso en la Rambla por el que ha sido condenado recientemente. Sin embargo «su especialidad» son los hurtos, y ya había sido detenido por otros diez hechos similares cometidos el año pasado en Barcelona, donde huyó tras ser perseguido por la Policía. Por su parte, su actual «socio» también acumulaba seis detenciones por varios hechos, si bien no tenía experiencia en este tipo de delitos y su papel se basaba principalmente en hacer de chófer.