Un turista británico de 41 años de edad fue detenido en la madrugada de este miércoles por la Policía Local de Calvià tras propinar una brutal paliza a su padre, de 70, en Santa Ponça. El septuagenario sufrió lesiones de consideración y tuvo que ser hospitalizado de madrugada, mientras que el acusado fue traspasado a la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación. De acuerdo con los datos recabados por Ultima Hora, los hechos ocurrieron sobre las tres de la madrugada en un establecimiento ubicado en la calle Puig des Teix, cuando uno de los clientes tuvo un súbito ataque de furia y se abalanzó sobre su padre, que no pudo defenderse.
El hijo sufre algunas alteraciones mentales y no se descarta que esa noche hubiera consumido alcohol, lo que mezclado con su medicación le provocó una airada reacción. Desde el hotel pidieron ayuda a la Policía Local de Calvià, que envió a una patrulla y procedió a la detención del agresor, que estaba fuera de sí. Mientras tanto, unos médicos atendieron al septuagenario, que sangraba por los oídos. La otorragia alarmó a los facultativos porque es indicio de lesiones craneoencefálicas.
El turista fue evacuado hasta un centro hospitalario y los agentes no pudieron tomarle declaración porque su estado lo impedía. No está claro si el hijo lo golpeó con el puño o también utilizó algún objeto contundente contra él. El acusado, mientras tanto, fue arrestado por un delito de lesiones y los agentes municipales lo transfirieron a la Guardia Civil. El extranjero pasó la noche en los calabozos y estaba previsto que se agilizara su pase a disposición judicial por las alteraciones mentales que presentaba.
Los gritos en el hotel alarmaron a otros clientes, que no sabían lo que estaba pasando. La familia británica pasaba unos días de vacaciones en Santa Ponça y hasta ese momento no había protagonizado ningún incidente. La rápida reacción del personal del hotel evitó que el señor sufriera lesiones más graves.