Un ladrón voraz y con fijación por el mismo bar. Un hombre, que se encuentra preso, aceptó este viernes una condena de un año y medio de cárcel tras admitir la autoría de dos robos con fuerza en un establecimiento ubicado en Las Ramblas de Palma con apenas tres días de diferencia, el 18 y el 21 de octubre del pasado año. La Fiscalía le apreció al hombre el atenuante de toxifrenia y de trastorno psíquico. El acusado, español de 38 años, se apoderó en total de 1.000 euros, dos tablets y una caja registradora y causó diversos desperfectos en el local para conseguir su objetivo.
En los dos asaltos el imputado, que tiene pendientes varios juicios por distintos delitos, utilizó para forzar la puerta de acceso de la cafetería una palanca. El primer robo se produjo el día 18 de madrugada. Una vez en el interior del local se hizo con 600 euros en una caja registradora. Pero no solo eso, sino que también se apoderó de dos tablets y tres juegos de llaves de la puerta de entrada. Apenas tres días después, el delincuente regresó al mismo bar. También de madrugada para repetir la fechoría. En esta ocasión robó 400 euros tras violentar con un objeto no identificado la caja del establecimiento.
La Policía Nacional arrestó al hombre el día 9 de noviembre y desde entonces se encuentra en prisión. Aunque no será la última vez que se siente en el banquillo de los acusados, ya que tiene varios juicios pendientes en los próximos meses. Además de pena de un año y medio de cárcel el procesado, asistido por Miguel Ángel Villalonga, tendrá que abonar a la propietaria del bar 1.000 euros y lo que se perite por los desperfectos en el local.