Un año de hurtos indiscriminados. Un mozo de almacén que robó 145.000 euros en aparatos electrónicos en una nave del polígono Can Valero de Palma se enfrenta a una condena de tres años de cárcel. La Fiscalía también acusa a la novia del hombre y reclama una pena de dos años de prisión para la mujer. Los acusados vendían los dispositivos a terceras personas a través de aplicaciones como Wallapop o en tiendas de compraventa. La Audiencia Provincial acogerá el juicio contra la pareja a principios de enero de 2022.
Los hechos se remontan a septiembre de 2019. El acusado, de 33 años y nacionalidad española, volvió a trabajar a finales de agosto de 2019 como mozo de almacén en una nave de Palma tras un negocio fallido junto a su pareja. El hombre se encargaba de recibir la mercancía que luego era distribuida a los dos centros de ventas de los grandes almacenes. Sabía que en el muelle 6 no había cámaras de seguridad y aprovechó para apoderarse de una gran cantidad de efectos de electrónica como teléfonos móviles de alta gama, iPads, cámaras o relojes.
Ocultaba los dispositivos entre su ropa y después los escondía debajo del asiento de su coche para eludir el control de seguridad. A continuación, la pareja vendía los efectos sustraídos a terceras personas o en establecimientos de compraventa. La Policía Nacional abrió una investigación tras tener conocimiento de lo ocurrido y detuvo al mozo de almacén el 28 de agosto de 2020. Los agentes intervinieron en su vehículo distintos aparatos tecnológicos. El hombre también entregó a los policías una parte del material que guardaba en el trastero de sus padres.
Los agentes recuperaron un iPad que la pareja había vendido por Wallapop y también intervinieron otros objetos en establecimientos de compraventa. La mercancía recuperada ascendía a 1.642 euros. El resto de efectos se encontraban inservibles para la venta ya que carecían del embalaje original y de accesorios. Los grandes almacenes perjudicados han cuantificado las sustracciones en un total de 145.061 euros. La Fiscalía aprecia en el trabajador la circunstancia agravante de abuso de confianza. El hombre deberá indemnizar a la empresa con 143.419 euros por el valor de los efectos sustraídos que no han sido recuperados.
El apunte
Numerosas deudas tras un negocio fallido de los acusados
La pareja había contraído numerosas deudas tras un negocio fallido. El acusado confesó ante los investigadores que estaba ahogado a nivel económico y que por ese motivo cometió los hurtos. Firmó un escrito en el que reconocía la autoría de los hechos y se mostraba arrepentido. Se comprometió a pagar 400 euros mensuales.