Vandalismo en estado puro. Un grupo de jóvenes, la gran mayoría de ellos menores de edad, reventó una marquesina de autobús mientras grababa sus hazañas en móvil. Los hechos tuvieron lugar en la madrugada de este domingo en la barriada palmesana de Cala Major.
Ante la mirada atónica de decenas de vecinos, los adolescentes comenzaron a propinar patadas a las cristaleras de la parada del bus de la EMT hasta lograr destrozarla. Una vez conseguido su propósito, fueron varias las personas que comenzaron a aplaudir mientras los chicos levantaban sus brazos en señal de victoria.
Durante varios minutos se produjeron gritos, amenazas y peleas entre dos grupos de adolescentes menas y ninis enfrentados entre ellos. La policía dispone del vídeo y está siendo analizado.