Way Down, es un thriller de acción donde se recoge la historia del atraco más espectacular al Banco de España. Una película protagonizada por Freddie Highmore, Luis Tosar o José Coronado, donde la banda de ladrones utiliza la red subterránea de la capital española para perpetrar el asalto. ¿Realidad o ficción? ¿Es posible realizar un butrón bajo tierra utilizando la red de túneles de Palma? «En esta vida no hay nada imposible, pero la realidad es que nuestro trabajo es ponérselo muy difícil a ladrones o terroristas. Somos los vigilantes de la ciudad subterránea», apunta Jaime Sempere, subinspector jefe de la Unidad Especial de Subsuelo de la Policía Nacional.
Peligros
Jaime, Víctor, Marisa, Guillermo y Daniel son los integrantes del ‘Indicativo Topo', los especialistas en la vigilancia y control de las entrañas de la capital balear. Con casi 60 años de historia hay cosas que nunca cambian. El uso de la red de alcantarillas y túneles por la delincuencia es algo que se viene produciendo desde hace décadas. Los riesgos, desde el punto de vista policial, son las intrusiones, sabotajes, atentados y butrones. El riesgo de sabotaje o de atentado sería fácil de eliminar si se neutraliza el riesgo de intrusión, pero sin embargo, el alcantarillado urbano de Palma tiene un sinfín de ramificaciones y también una ingente cantidad de puntos de acceso que implica una exhaustiva revisión de los ‘Topos' de la Unidad de Subsuelo.
Un equipo de Ultima Hora ha compartido una jornada de trabajo con los hombres y mujeres de la unidad. Tras recibir las instrucciones y formación básica nos colocamos las medidas de protección, casco, linternas, cuerdas etc... y enganchados a la grúa descendemos a unos trece metros de profundidad. Una vez abajo, nos encontramos diferentes infraestructuras subterráneas que conviven en el entresijo urbano de la ciudad que abren un espacio temporal que nos hacen retroceder décadas, e incluso algunos siglos. Es el caso del antiguo túnel del tren que unía el puerto de Palma con la zona centro.
Además de ser el transporte de mercancías de aquella épocas se usaba como refugio antiaéreo para la ciudadanía, siendo visibles aún las escaleras que facilitaban el acceso de la superficie. Dicho túnel comunicaba la antigua estación del tren, de la calle Marqués de Fontsanta y el puerto comercial. Se comenzó a construir en 1925 y tiene una longitud de 1.550 metros que recorren el corazón de Palma y finaliza su trayecto en el Parc de la Mar. Comenzó a funcionar el 5 de febrero de 1931. Finalmente quedó obsoleto y acabó por desaparecer debido a que las mercancías se empezaron a transportar en camión al nuevo Dique del Oeste.
«En la actualidad uno de los peligros policiales a los que nos podemos enfrentar son los sabotajes o intentos de butrón. Los ladrones podrían utilizar la red subterránea para perpetrar atracos en locales, viviendas de alto standing o bancos, pero nuestra presencia y vigilancia lo hace prácticamente impensable. Toda la red se inspecciona con frecuencia y, los edificios oficiales como Fiscalía, juzgados, comisarías, capitanía etc... son revisados a diario», concluye el subinspector Sempere. Tras horas de intenso trabajo finaliza una jornada más de la Unidad Especial de Subsuelo. «Base (Sala del 091), indicativo topo sale a la superficie».