Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro jóvenes, tres de ellos de 19 años, como presuntos autores de un delito de amenazas graves y un cuarto, de 21 años, como presunto autor de un delito de tenencia ilícita de armas y amenazas graves en Palma. Según ha informado Policía Nacional este sábado en nota de prensa, el pasado 28 de octubre a primera hora de la noche, se produjeron varios disparos con arma de fuego contra un edificio en la calle Manacor de Palma, impactando varios proyectiles con la fachada de un inmueble, donde en ese momento se encontraba una mujer con menores de edad. Acto seguido, dos vehículos se dieron a la fuga, aportando varios testigos la descripción parcial de los vehículos.
En el lugar se personaron varias patrullas policiales que realizaron las primeras gestiones, recabaron datos y auxiliaron a las víctimas. En uno de los vehículos viajaba un joven, supuestamente el presunto autor de los disparos y que pertenece al clan de los Peludos, verificando los agentes que en el domicilio tiroteado vivían algunos miembros del clan rival. El grupo de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y, junto a agentes de la Brigada de Policía Científica y el apoyo de Seguridad Ciudadana, efectuaron una inspección en el lugar de los hechos, interviniendo diferentes casquillos y confirmando hasta seis disparos.
Los agentes llevaron a cabo varias diligencias y gestiones, obteniendo pruebas e indicios incriminatorios contra los ocupantes de los vehículos que se dieron a la fuga cuando se produjeron los disparos, averiguando que uno de ellos sería el principal investigado y presunto autor de los disparos y que tanto éste como los otros tres serían presuntos responsables de un delito de amenazas graves. Los agentes consiguieron intervenir los vehículos que se dieron a la fuga, en uno de ellos, en el que viajaba el principal investigado, se hallaron 21 cartuchos de una pistola que presuntamente se correspondían con los casquillos hallados en el lugar del tiroteo. De ese modo, el pasado miércoles se detuvo al principal investigado como presunto autor de un delito de tenencia ilícita de armas y amenazas graves, llevando a cabo los policías una entrada y registro al objeto de localizar más pruebas para el total esclarecimiento de los hechos. Al día siguiente, se detuvo a otros tres jóvenes como presuntos autores de un delito de amenazas graves. Los mismos, una vez fueron oídos en declaración, quedaron en libertad con cargos. El principal investigado pasó a disposición judicial este viernes por la tarde y la autoridad judicial decretó prisión provisional para el mismo.
Antecedentes de los hechos
El pasado 28 de mayo se detuvo a ocho personas, de entre 21 y 70 años de edad, como presuntos autores de un delito de tentativa de homicidio, amenazas, tenencia ilícita de armas, y a cuatro de ellos además como presuntos autores de un delito de allanamiento de morada. Al parecer, el detonante del suceso pudiera ser las desavenencias por la ocupación de una vivienda el 12 de mayo. Transcurridos unos días, el 18 de mayo, sobre las 18.30 horas, se produjeron una serie de incidentes en los que supuestamente varios integrantes de uno de los clanes habrían amenazado e intentaron agredir con armas de fuego a integrantes del clan rival, consiguiendo herir a uno de ellos. Los agresores se personaron en el domicilio de las víctimas con armas de fuego y varios de ellos realizaron disparos a la vivienda. Posteriormente fracturaron la puerta y accedieron al interior, profiriendo amenazas. Como consecuencia uno de los moradores sufrió varias heridas de bala, siendo trasladado a un centro médico, siendo dado de alta una vez fue asistido. La investigación está todavía abierta, pero los investigadores sospechan que el último tiroteo pudiera ser una respuesta a varios incidentes que se han producido entre los dos clanes enfrentados.