Tenía obsesión y deseos libidinosos con su vecina de enfrente y trazó un plan para conseguir mantener relaciones sexuales con ella. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un hombre, español de 48 años, acusado de un presunto delito de abusos sexuales. Los hechos tuvieron lugar hace unos días en una vivienda de la capital balear. Los vecinos establecieron cierta relación de amistad y con el pretexto de hablar de su perrito ella le invitó a entrar a su casa. La moradora, muy amablemente, le sirvió una copa de vino y ambos dialogaron durante varios minutos sobre el can. En un momento dado, ella comenzó a sentirse indispuesta, aturdida y perdió la consciencia. Es más, lo último que recuerda es que apareció tumbada en el sofá de su casa con su vecino sobre ella. En ese momento, el hombre le confesó que habían mantenido una frenética sesión de sexo.
Al día siguiente, la mujer presentaba un fuerte dolor de cabeza y sus compañeros de trabajo la animaron a que recibiera asistencia médica. Una vez allí, le practicaron unos análisis y saltó la alarma. La mujer dio positivo en benzodiazepinas, un potente fármaco psicotrópico con efectos sedantes, hipnóticos y amnésicos. En un primer momento, la víctima no sospechaba de su amable vecino, pero días más tarde, la situación se volvió a repetir de nuevo cuando la mujer tomó de nuevo una copa de vino con el ahora detenido arrojando un nuevo positivo. El viernes, los agentes de la UFAM (Unidad de Atención Familia Mujer) de la Policía Nacional practicó la detención del sospechoso por un presunto delito de abusos sexuales.
Punto de vista
El juez decretó un auto de libertad con cargos para el acusado
El arresto del sospechoso, español de 48 años sin antecedentes penales hasta la fecha, se produjo el pasado viernes por la noche. Tras practicar las diligencias previas, la Policía Nacional presentó al detenido ante el juez de guardia. El magistrado, tras escuchar su versión, lo deja en libertad con cargos.