La Policía Nacional está investigando dispositivos electrónicos del hombre arrestado por grabar videos sexuales con una menor y no descarta la aparición de más contenido pornográfico así como la aparición de más víctimas.
Así lo han explicado este miércoles el jefe del Grupo de Investigación de la UFAM, José David López, y la inspectora Yolanda Alonso, que han explicado que la menor y el detenido, que quedó en libertad con cargos, se conocieron a través de una tercera chica con la que el hombre también mantuvo una relación.
La víctima había contactado con la otra menor para vender unas prendas de ropa y la joven presentó al hombre como un amigo y que intervendría como intermediario en la venta.
La investigación, han añadido, va encaminada igualmente a determinar si el hombre compartió el contenido sexual con terceras personas.
Los agentes han recalcado que la investigación se centra principalmente en la creación del material pornográfico y el uso que se hace de él ya que, han insistido, aunque la relación entre un hombre de 45 años y una menor de 16 pueda entenderse como reprobable, no es un hecho delictivo.
Las primeras pesquisas apuntan también a la posibilidad de que el individuo «animara y ayudara» a la víctima y a su hermana a denunciar a sus padres ya que, según han apuntado, los progenitores no veían bien la relación, no existía una buena relación en el núcleo familiar y podrían tener intención de abandonar el domicilio.
La Policía Nacional detuvo este martes a un hombre de 45 años en Palma por grabar vídeos sexuales con una menor de edad, amenazarla con difundirlos y enviarle numerosos archivos pornográficos.
El hombre, de nacionalidad española, ha sido arrestado como presunto autor de un delito de corrupción de menores en la modalidad de pornografía infantil y provocación sexual a una menor.
La menor había sido ingresada en un centro de menores, junto a su hermana, separada de sus progenitores después de denunciar un presunto caso de violencia doméstica. Sin embargo, según han señalado, la propia víctima reconoció que los hechos denunciados no eran «del todo ciertos». La menor había acudido a presentar esa denuncia acompañada de un adulto, a quien presentó como un amigo que la estaba ayudando.
En el centro, los educadores encontraron en el móvil de la menor un video sexual en el que aparecía junto a aquel hombre. Los educadores informaron a la Policía Nacional, y la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) abrió una investigación.
Los agentes tomaron declaración a la menor, que contó que conocía al hombre desde hace dos meses y que durante ese tiempo la había obligado a ser su pareja bajo amenaza de difundir videos sexuales de ambos.
Los policías comprobaron que el sospechoso enviaba numerosos archivos pornográficos a la menor, y encontraron también varios videos sexuales grabados por el propio detenido en los que aparecían ambos, por lo que procedieron al arresto.