El aeropuerto se quedó este viernes durante dos horas, entre las 12.15 y 14.14 horas, sin el servicio de transporte de taxis en la zona de llegadas, porque los taxistas optaron por hacer un paro patronal en protesta por la presencia de taxistas piratas que recogían pasajeros sin licencia ni autorización del Ajuntament.
Una pelea fue el origen del paro que AENA-Palma tuviera que enviar personal de seguridad a la zona. Tanto el Ajuntament de Palma como la Direcció General de Mobilitat i Transports del Govern fueron informados para que tomaran cartas en el asunto y pusieran orden.
Personal de AENA informó en todo momento a los pasajeros que buscaran un transporte alternativo, como el autobús, o el Aerotib.
El problema de fondo radica en que la Policía Local no está el tiempo que toca controlando el transporte público en la zona de llegadas, que es la más conflictiva.
«Una vez restablecido el servicio, el Ajuntament ha decidido reforzar la presencia policial durante todo el puente de Tots Sants».
Desde la Conselleria de Mobilitat puntualizaron: «Hacemos controles periódicos precisamente para intentar evitar estas prácticas de intrusismo e incoar los correspondientes expedientes administrativos que pueden derivar en sanciones».
Las mismas fuentes de Mobilitat, respecto a las peleas, afirmó: «En caso de que se produzcan enfrentamientos o agresiones, son los cuerpos policiales los que deben de intervenir. Hemos desplazado inspectores al aeropuerto para llevar a término las actuaciones correspondientes siempre actuando en colaboración con la policía».
El director general de Mobilitat, Jaume Mateu, y el concejal de Mobilitat de Cort, Francesc Dalmau, se vieron obligados a negociar con los taxistas para restablecer el servicio por los perjuicios que se estaban ocasionando a cientos de pasajeros.
Ambos ratificaron a los representantes de los taxistas que se iban a implicar de lleno para perseguir y erradicar la piratería y el intrusismo en el sector del transporte.
El colectivo de taxis mostró este viernes su indignación por la actitud pasiva de Cort y del Govern en esta materia: «No podemos aguantar ni soportar la actuación de los piratas porque no tienen licencias de actividad para operar en Son Sant Joan, por lo que pedimos a las administraciones que en los momentos punta asignen efectivos policiales y evitar, con ello, las imágenes de enfrentamientos. Es algo que no se tiene que repetir, pero para ello debe haber presencia policial».