La Guardia Civil de Seseña (Toledo) ha detenido a un hombre de 35 años que abandonó a un bebé de unos tres meses en su coche, cuando huía para no ser detenido por el hurto de una bicicleta de competición, de 8.000 euros, que robó en Madrid y había llevado a reparar a una tienda del citado municipio.
Según ha informado este miércoles en una nota de prensa la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo, el detenido había dejado abandonado a su hijo, de unos 3 meses, en el interior de su coche, cuando se dio cuenta de que estaba siendo buscado por el robo de la bicicleta.
El vehículo estaba mal aparcado en las proximidades de la tienda de deportes a la que había llevado la bicicleta robada, y en su interior los agentes encontraron al niño, llorando, sentado en la silla portabebés que estaba colocada en el asiento trasero.
Inmediatamente, los guardias civiles detuvieron al hombre, que fue localizado en una calle cercana, después de que saliera huyendo al percatarse de la presencia policial.
El detenido había robado el pasado mes de febrero en un aparcamiento de Madrid una bicicleta de alto rendimiento, valorada en 8.000 euros, que se utiliza para competiciones contrarreloj, cuya sustracción fue denunciada en una comisaría de la Policía Nacional.
Posteriormente, a través de las redes sociales se determinó que la bicicleta podría encontrarse en la zona de Seseña, por lo que la Guardia Civil de esta localidad inició una investigación y logró identificar a la persona que estaba usándola, un hombre de 35 años y nacionalidad colombiana, con numerosos antecedentes delictivos.
El bebé ha sido entregado al abuelo materno, mientras que el padre ha sido puesto a disposición del juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Illescas (Toledo) como presunto autor de un delito de abandono de menor y de un delito de hurto.