Un joven ha sido condenado a dos años de cárcel por abusos sexuales a su sobrina durante una comunión en un hotel de Cala Mandía, en Manacor. El acusado se ha declarado culpable en el juicio celebrado este lunes en la Audiencia de Palma e indemnizará a la víctima con 6.000 euros por los daños morales ocasionados. El procesado no ingresará en prisión con la condición de que no cometa ningún delito en los próximos tres años y de que realice un curso de educación sexual.
Los hechos por los que ha sido enjuiciado se produjeron la tarde del 17 de mayo de 2014. El joven se encontraba en la comunión de su sobrino en un hotel de Cala Mandía y aprovechó que su sobrina, de 8 años, tenía que ponerse el bikini para acompañarla a la habitación. Una vez dentro del cuarto le dijo que debía ducharse. La niña accedió porque su tío le dijo que no le dejaría bajar a la piscina del hotel.
La menor se desnudó, entró en la bañera y el joven le hizo tocamientos en la zona genital. El 28 de noviembre de 2018, la madre de la perjudicada interpuso una denuncia ante la Policía Nacional, que detuvo al acusado.
La Fiscalía reclamaba al principio de proceso judicial una condena de cuatro años de cárcel por un delito de abusos sexuales a menor de 16 años. La representante de Ministerio Público ha rebajado su petición tras llegar a un acuerdo con la letrada de la acusación particular y la defensa.