Un hombre ha sido condenado por coaccionar a su expareja con reseñas negativas en Google de su despacho de abogados. La jueza de lo Penal número 7 de Palma le ha impuesto una pena de 35 días de trabajos comunitarios por un delito de coacciones leves y la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 100 metros de la denunciante durante un año.
La sentencia recoge que el acusado, español de 30 años, remitió correos electrónicos a su expareja, entre septiembre y noviembre de 2019, en los que le exigía la devolución de un dinero.
En los emails, según el fallo, la tachaba de «miserable» y le reclamaba, además, un ordenador. Los correos también se los envió a la hermana de la denunciante. A lo largo del mes de noviembre publicó reseñas negativas en Google a través de su perfil, el de su madre y el de su novia, del despacho de abogados de su anterior pareja. «Si el acusado creía que su expareja le debía un dinero podría habérselo reclamado de muchas otras formas, cuando además esa reclamación se produjo un año después de finalizar la relación y sin haber tenido más contacto entre ellos que un email en febrero de 2019», indica la jueza en la sentencia.
La magistrada considera que el hombre era «plenamente consciente» que con los comentarios y reseñas negativas perjudicaría a la denunciante. «El acusado no ejerce violencia física, pero sí una intimidación directa que genera un ambiente de intranquilidad y desasosiego a la mujer».
La jueza ha absuelto al hombre de delitos de descubrimiento de secretos, daños y leve de vejaciones injustas. El abogado de la víctima reclamaba una condena de tres años y medio de cárcel para el procesado, que fue defendido por el letrado Iván García López.
La acusación particular también reclamaba una indemnización de 2.000 euros para la mujer, que tuvo su página web inoperativa durante un tiempo porque el acusado desvinculó el dominio del email que utilizaba.
Sin indemnización
La jueza señala que en el juicio no se hizo ninguna mención respecto a la cuantía reclamada por la mujer. Ni se acreditó ni se justificó. El acusado, según la resolución, deberá eliminar de Google las reseñas y comentarios efectuados desde su perfil y desde el de su madre sobre el despacho de abogados de su expareja.