Un joven de 19 años, y que se encontraba de vacaciones en Magaluf, fue juzgado ayer en Palma acusado de un delito de abuso sexual por pellizcar en las nalgas a una chica en la piscina del hotel donde ambos estaban alojados en julio del pasado año. El acusado, que declaró por videoconferencia, se enfrenta a una pena de multa de 3.600 euros y una indemnización de 100 euros a la víctima
El acusado explicó, con ayuda de una traductora, que el 28 de julio, sobre las 16.00 horas, se encontraba en la piscina del establecimiento hotelero en compañía de sus amigos. En un momento nadó en dirección a la perjudicada, de nacionalidad francesa. «No recuerdo haberle tocado. De repente me dio dos bofetones y le pedí disculpas por si le había molestado algo», subrayó. Esta versión es distinta a la ofrecida por la víctima. La joven relató a la juez que llegó al hotel ese mismo día y que en la piscina conocieron ella y sus amigas a unos chicos ingleses. «Cuando salí del agua uno de ellos vino hacia mí y me agarró del trasero. En ese mismo momento me pidió perdón», relató la chica. Asimismo reconoció que le dio dos bofetones y que los amigos se rieron.
También declaró en el juicio la recepcionista del hotel. «La chica vino a mí muy alterada diciendo que un chico inglés le había tocado el trasero y que llamara a la policía. Poco después también se acercó el joven, que se notaba que había bebido de más, y no paraba de pedir perdón llorando», subrayó.
La defensa del acusado destacó en su informe que la acción del turista es «reprochable», pero que no había intención sexual y pidió la absolución. También solicitó que en caso de ser condenado lo sea por coacciones leves y no por abuso sexual.