Mortal Kombat, la película de fantasía oscura de artes marciales y gore recién estrenada en las carteleras de nuestro país, fue la inspiración para que un grupo de cuatro adolescentes la emprendieron a golpes contra un padre y su hijo menor a la salida de una sala de cine de Palma.
Según fuentes próximas al caso a las que ha tenido acceso Última Hora, los hechos tuvieron lugar el pasado día 22 de abril, concretamente, a las 20:15 horas, cuando una pareja acudió a los cines en compañía de su hijo. Una vez dentro de la sala, observaron cómo un grupo de jóvenes no respetaban la distancia de seguridad y requirieron al acomodador de las instalaciones su ayuda. El trabajador reubicó al citado grupo de chicos en otros asientos. Acabada la película y ya fuera de las salas de cine, el citado grupo comenzó a seguir a la familia, formada por una pareja de unos 45 años y un hijo adolescente, por el centro comercial, profiriendo todo tipo de insultos y amenazas.
Según se recoge en las cámaras de seguridad del centro comercial, no dejaron de lanzar patadas y puñetazos al aire, al más puro estilo cinematográfico.
Tras acorralar al padre de familia, le insultaron, amenazaron e incluso escupieron en la cara. De forma sorpresiva, los menores comenzaron a propinar patadas y puñetazos a sus víctimas dejándolos gravemente heridos. En ese momento, la madre comenzó a gritar pidiendo ayuda a los vigilantes de seguridad del recinto. Estos corrieron en su auxilio, pero los agresores se dieron a la fuga. «En cuanto vieron llegar a los vigilantes los muy cobardes se cagaron encima y huyeron a la carrera», apunta uno de los testigos.
Gracias al sistema de seguridad del recinto los delincuentes han sido identificados y detenidos. Las imágenes también reflejan una secuencia donde puede verse a los chicos, una vez perpetrada la agresión, recordando lo sucedido y reproduciendo la escena de patadas y puñetazos que habían propinado a sus víctimas. Los agresores son dos chicos de 17 años, uno de 14 y otro de 13 años. Todos ellos españoles de etnia gitana y un marroquí. Finalmente, el Grupo de Homicidios localizó a los agresores y procedió a su detención por un presunto delito de lesiones graves.