El año de la pandemia del coronavirus, 2020, ha supuesto una caída de los delitos en las Islas Baleares de un 22,2 %, entre los que destacan la disminución de los hurtos (-53 %), los robos con violencia e intimidación (-42 %), el tráfico de drogas (-35,1 %) y las agresiones sexuales con penetración (-36 %).
El año pasado, Baleares registró 60.068 infracciones penales frente a las 77.662 de 2019, según el Balance de Criminalidad hecho público este martes por el Ministerio del Interior.
Por islas, las infracciones penales cayeron un 19,9 % en Mallorca, un 8,9 % en Menorca, un 39,9 % en Formentera y un 38,3 % en Ibiza.
Durante el año pasado, el número de hurtos denunciados en las Islas Baleares se situó en 12.483, un 53 % menos; 762 los robos con violencia e intimidación (-42 %), 426 los delitos de tráfico de drogas (-35,1 %), 57 las agresiones sexuales con penetración (-36 %) y 2.582 los robos con fuerzas en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (-27 %).
Los robos con fuerza en los domicilios también se redujeron hasta los 1.848, un 28 % menos, así como los secuestros (4 en 2020 y 6 en 2019) y los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa, 32 en total el año pasado (-23 %).
En cuanto a los municipios más poblados de Mallorca, las infracciones penales cayeron en Palma un 18 %, un 42 % en Calvià, un 26 % en Llucmajor y un 14 % en Manacor. Sin embargo, subieron en Marratxí, un 5,8 % y un 11,7 % en Inca.
En el caso de Palma, las denuncias por tráfico de drogas se cifró en 124, un 35 % menos, 6.548 lo hurtos (-49 %), 477 los robos con violencia e intimidación (-33 %) y 20 los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa (-16 %).
En España, los delitos descendieron el pasado año un 19,4 % respecto a 2019 debido fundamentalmente a la crisis sanitaria del coronavirus, una reducción que afectó a la práctica totalidad de los tipos penales, salvo los intentos de homicidio y asesinato y el tráfico de drogas, con aumentos del 8,7 % y 2,2 %, respectivamente.
El pasado año se registraron en España 1.773.366 infracciones penales frente a las 2.199.475 de 2019.
Los mayores descensos de todo el país se produjeron en los hurtos, con casi una reducción del 40 %, los robos con violencia o intimidación (-31 %) y los robos en domicilios (-28,3 %), en un año en el que se contabilizaron 299 homicidios y asesinatos consumados frente a los 331 de 2019, lo que supone una reducción del 9,7 %.