Arrestado por reventar una taza de cerámica en la cabeza a su madre durante una acalorada discusión familiar.
A las 13.30 horas del pasado lunes, la central policial del 091 fue alertada de que en un domicilio de la calle Picos de Europa, en la barriada palmesana de Son Gotleu, se estaba produciendo una riña. Acto seguido, una nueva llamada confirmaba que en el transcurso de la misma se había producido una agresión y que había una mujer con la cabeza totalmente ensangrentada.
Auxilio
Rápidamente, agentes del Cuerpo Nacional de Policía se personaron en el lugar. A su llegada, los funcionarios policiales localizaron al ahora detenido muy nervioso y alterado. En un primer momento, el acusado, un marroquí de 38 años de edad y con más de una decena de antecedentes policiales por diversos motivos, reconoció los hechos de forma parcial.
En ese instante, llegó hasta la posición de los policías una mujer (víctima) con la cabeza y rostro totalmente ensangrentado acompañada de su actual pareja sentimental.
Nada más llegar, confirmó que había sido atacada por su propio hijo por una discusión banal. En un primer momento no tenía pensado interponer denuncia pero, finalmente, decidió ponerla ante el miedo que siente de ser agredida de nuevo por su hijo.
Ambulancia
Los agentes solicitaron una ambulancia del SAMU-061 para que atendiera a la mujer de sus heridas. La agredida precisó ser trasladada y los facultativos le pusieron varios puntos de sutura en la herida.
Madre e hijo coincidieron en señalar que el motivo que originó la discusión fue por un enfrentamiento entre ella y su nuera (mujer de su hijo) por un tema menor. Todo apunta a que la relación entre suegra y nuera está muy deteriorada desde hace tiempo y que no se aguantan.
«No hay nada más feo que pegarle a una madre. Este chico es un delincuente y siempre está generando problemas. Lo han detenido muchas veces y el día menos pensado como un juez no lo ponga en su sitio esto acabará en tragedia», apunta un vecino de la zona. El acusado cuenta con 13 antecedentes por robos, falsificación, lesiones, malos tratos, entre otros.
Nuera y suegra mantenían una tensa relación
Tensión entre la suegra y su nuera. Según los testigos, ambas mujeres arrastraban un pasado familiar cargado de desavenencias, discusiones y enfrentamientos. El presunto agresor, hijo de la víctima, es un conocido delincuente con un pasado muy violento. La investigación también apunta que la relación entre el ahora detenido y la actual pareja de su madre no es buena.