Los servicios de emergencias han auxiliado a una mujer de Búger que había ingerido 40 pastillas de un medicamento y se encontraba al borde de la muerte en su domicilio.
Un familiar de la víctima fue quien dio la voz de alarma al centro de emergencias del 112, que contactó rápidamente con la Guardia Civil de Inca y con los bomberos, por si era necesario derribar la puerta para acceder a la casa.
Al llegar, los agentes consiguieron entrar y encontraron a la señora en muy mal estado. Una ambulancia la evacuó con celeridad hasta el hospital de Inca. Los investigadores encontraron dos o tres blísters vacíos de un potente medicamento.