Los caballos de la Policía Montada de Palma, pertenecientes al cuartel de San Fernando, se han sumado a la vigilancia en entradas y salidas de colegios, tras la psicosis desatada por los supuestos intentos de secuestros de algunos niños en Mallorca.
Los agentes de esta sección vigilan las entradas y salidas de los centros docentes, y también regulan el tráfico si es necesario.
Su presencia ha sido muy bien acogida por los padres de alumnos, muchos de los cuales se acercan con los niños para fotografiarse delante de los caballos. Desde este lunes, tal y como adelantó Ultima Hora, la Policía Nacional patrulla en los exteriores de los colegios, para tranquilizar a las familias de los escolares.
De forma paralela, el Grupo de Atracos busca a los dos hombres que iban en una furgoneta azul y que el pasado viernes se acercaron a un niño de 8 años que salía del CIDE, en Son Rapinya, y le instaron a subir al vehículo. Los agentes visitan todos los negocios de la zona que tienen cámaras y también revisan los vídeos de tráfico de las inmediaciones. De momento, no se han practicado detenciones.