Un hombre admitió este martes en un juzgado de Palma haber acosado y abusado sexualmente de una compañera de trabajo en octubre del pasado año en Felanitx. El procesado hacía comentarios obscenos a la mujer y en una ocasión, tras acabar la jornada laboral, la manoseó y la besó.
El acusado, de nacionalidad española, aceptó un año y tres meses de prisión y el pago de 600 euros por los daños morales ocasionados a la víctima, cantidad que fue abonada antes de la vista oral.
Relación laboral
Tal y como describe la Fiscalía en su escrito, el imputado aprovechaba la relación laboral que existía entre ambos para acosar y abusar de ella. Durante el mes de octubre de 2019 se repitieron varios episodios. En una ocasión, el varón le hizo proposiciones sexuales utilizando palabras obscenas. No contento con ello, además, le enviaba mensajes con la intención de quedar y le tocó las nalgas en tres ocasiones. La perjudicada en todo momento le dejó bien claro que no quería tener ninguna relación con él. Sobre las 22 horas del 25 de octubre, y una vez finalizada la jornada laboral, y cuando la mujer se iba a su subir a su coche, el acusado se abalanzó sobre ella y le tocó la vagina por encima de los pantalones, a la vez que le daba besos por el cuello. En ese instante, y cuando la víctima quería deshacerse de él, le decía «no pienso parar, me tendrás que pagar para quitarme de encima».
Finalmente la perjudicada pudo entrar en su vehículo y abandonar el lugar. En un principio, la Fiscalía pedía para el acusado, defendido por la letrada Bel Jaume, dos años y seis meses de prisión. Tras un acuerdo de conformidad, la pena se vio reducida a la mitad.
La pena quedó suspendida y no entrará en la cárcel
Durante la vista se acordó que la pena quedase suspendida durante tres años. Eso sí, con condiciones. El condenado, de 29 años, no podrá delinquir en los próximos tres años, tampoco acercarse ni comunicarse con la víctima y tendrá que someterse a un programa de formación sexual.