El conductor que atropelló a cuatro personas a la salida de una discoteca de s'Arenal en abril del año pasado ha asegurado durante el juicio en la Audiencia de Palma que «en ningún momento» lo hizo con intención de causar daño.
El procesado, de 20 años, que desde la madrugada del suceso se encuentra en prisión preventiva, ha declarado durante la vista que esa noche discutió con un conocido que se encontraba en el interior de la discoteca: «Fue una discusión más que una pelea».
El acusado ha reconocido ante el tribunal que había consumido bebidas alcohólicas y marihuana y ha manifestado que no recuerda haber conducido el coche «a toda velocidad» en dirección contraria por la calle de la discoteca después de la discusión, como le acusa la Fiscalía.
Tras la discusión, cogió su coche y se fue del lugar, si bien minutos después volvió a s'Arenal porque «no veía por el retrovisor los coches de sus amigos y no sabía si habían tenido algún accidente».
Al llegar a la calle de la discoteca, ha dicho, el pedal del freno del coche no le respondía y tiró del freno de mano unos 20 metros antes del establecimiento, si bien no pudo evitar arrollar a cuatro de las veinte personas que se encontraban en ese momento a la salida del local.
También ha comentado que desde pequeño sufre un trastorno de hiperactividad, que acude a un neurólogo y que recibe atención psicológica cada día desde que se encuentra en prisión preventiva.
Por su parte, el joven con el que discutió esa noche, que ha declarado como testigo, ha relatado le sacó del interior de la discoteca para evitar una pelea y que, una vez fuera, el acusado se quitó la camiseta y le pegó: «Me dio un puñetazo y me mordió la cara».
Unos amigos separaron a los dos jóvenes mientras el acusado amenazaba de muerte al testigo, con el que había jugado en el mismo equipo de fútbol cuando eran pequeños. Después de la disputa, fue a vomitar a una calle cercana a la discoteca, por lo que en el momento del atropello no se encontraba delante del local.
Uno de los afectados por el incidente, menor de edad en ese momento, ha confirmado que se produjo la pelea a las puertas de la discoteca entre el conductor y el otro joven, en contra de lo que ha defendido el acusado.
Ha señalado que permaneció 72 días de baja por las lesiones que sufrió y que le han quedado secuelas físicas y psíquicas, por lo que pide una indemnización económica de 2.028 euros por las heridas y 600 euros por las secuelas, al igual que otra de las personas atropelladas, también menor.
Al inicio de la vista, el abogado defensor ha solicitado la nulidad de la grabación de la puerta de acceso realizada por una de las cámaras del establecimiento de ocio porque dicha prueba «invade los derechos fundamentales» de su cliente.
El Ministerio Fiscal solicita para el joven 10 años de prisión por cometer cuatro delitos de homicidio en grado de tentativa
El acusado ya había sido condenado anteriormente por dos delitos contra la seguridad vial por conducir sin carné en 2017 y en 2018.