Ha tenido 10 oportunidades y no las ha sabido aprovechar. Una jueza ha ordenado el ingreso en prisión de un joven que ha quebrantado 11 veces la prohibición de acudir a la estación Intermodal de Palma.
El detenido, de 22 años, explicó ante la magistrada de guardia que sentía animadversión hacia los vigilantes de seguridad porque en una ocasión le trataron mal. Además, añadió que quería entrar en la cárcel.
El ahora encarcelado es un viejo conocido de los guardias. El pasado lunes, a las 19.45 horas, fue detenido por la Policía Nacional por presuntos delitos de quebrantamiento de medida cautelar, daños y amenazas.
Enfrentamiento
El sospechoso tenía prohibido aproximarse a menos de 200 metros de la Intermodal, pero le dio igual. Acudió a la estación y causó daños materiales en los tornos de acceso a los andenes y, a continuación, se enfrentó al personal de seguridad que le recriminó la acción. El joven, que se encontraba muy agresivo, amenazó a uno de los vigilantes que lo retuvo.
La Policía Nacional recibió una llamada del equipo de seguridad que solicitaba su intervención tras haber retenido al chico. Los agentes que se desplazaron hasta la Intermodal comprobaron que le constaba una orden en vigor que le prohíbe aproximarse a menos de 200 metros de la estación y procedieron a su detención.
El joven, tras ser arrestado por onceava vez, declaró de forma espontánea ante los policías: «Lo tengo muy claro. En cuanto me soltéis, pienso volver a la estación Intermodal y mataré a los vigilantes».