Un hombre, de nacionalidad española y 54 años de edad, se enfrenta a una pena de cinco meses de prisión por acosar en 2015 a una mujer en sa Pobla, con la que mantenía una relación laboral. Además de proponerle de manera reiterada mantener relaciones sexuales, y siempre encontrar el rechazo de la perjudicada, el imputado la llamó por teléfono una quincena de veces en apenas ocho horas.
El procesado, que no cuenta con antecedentes penales, se sentará en el banquillo de los acusados en un juzgado de lo Penal de Vía Alemania de Palma en las próximas semanas. La Fiscalía le acusa de ser autor de un delito de acoso sexual.
Acuerdo laboral
Según el escrito de acusación pública, el imputado acordó con la víctima una relación laboral. El hombre trabajaba en una finca de sa Pobla y la mujer le ayudaba los domingos dos horas por la tarde. Incluso pactaron el precio de la hora trabajada por parte de la fémina: cinco euros.
El 27 de septiembre de 2015, el varón quedó con ella sobre las 19.30 horas para recogerla con su motocicleta frente al PAC de la localidad para llevarla al lugar de trabajo. Durante el trayecto en el vehículo el acusado le dijo que se acercara más a él, rechazando la mujer sus deseos. Ante esto, el hombre la cogió del brazo y de la pierna para que se acercara, poniéndole las manos sobre las piernas. Minutos más tarde, ya en la finca, el imputado le propuso a la perjudicada mantener relaciones sexuales a cambio de 50 euros a la vez que le hizo sentarse en el sofá. No contento con ello le dijo «tú lo que quieres es follar conmigo». Ella volvió a rechazar al hombre.
Poco después la mujer rompió a llorar y abandonó la vivienda que pertenece a la finca Una semana después de este desagradable episodio, el imputado quiso contactar con la mujer. Para ello la llamó un total de quince veces al móvil entre las 15.00 horas y las 23.00. Tuvo que ser la hermana de la víctima quien descolgó el teléfono, al ver la desesperación y el estado de angustia de la perjudicada. Se hizo pasar por la mujer y le pidió que le dejara en paz. El juicio se celebrará próximamente en Palma.
«Estado degradante» para la víctima por el trato
La Fiscalía considera que el trato dado por el hombre a la víctima cuando le propuso mantener relaciones sexuales provocó en la mujer un «estado degradante».
En el suceso de la vivienda, la perjudicada abandonó el lugar llorando por las palabras malsonantes y las proposiciones deshonestas de quien solo era su jefe dos horas a la semana.