El joven acusado de abusar sexualmente de su sobrina de 13 años en el domicilio de su hermana, en Palma, ha reconocido este lunes los hechos en el juicio celebrado en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma y será condenado a una pena de dos años y un mes de cárcel.
La defensa del acusado y la Fiscalía han alcanzado un acuerdo de conformidad. Con este acuerdo, el acusado ha admitido lo ocurrido y ha visto rebajada la pena inicial que pedía el Ministerio Fiscal, que originalmente era de cinco años de prisión.
La rebaja de la condena obedece a una atenuante de reparación del daño, puesto que el acusado, quien ha manifestado estar «muy nervioso», ha entregado 12.000 euros a la víctima por los perjuicios.
Con la condena, el acusado tampoco se podrá presentar a las elecciones. Además, se le impone una orden de alejamiento de 500 metros de la víctima y la imposibilidad de comunicarse con ella durante diez años. Una vez que salga de la cárcel, el acusado estará en libertad vigilada durante siete años y está obligado a asistir a un programa de formación de educación sexual.
El joven ha admitido los hechos narrados en el escrito de acusación. En marzo de 2018, tras acudir al domicilio de su hermana, donde vivía su sobrina de 13 años, cogió a la menor por el brazo y la llevó a la habitación para dormir.
En ese momento, le bajó la parte de abajo del pijama y la ropa interior, aprovechando ese momento para bajarse la suya y abusar sexualmente de la menor. Por ese motivo, concurre la agravante de abuso de confianza.
El Tribunal ha dictado sentencia firme en el acto y el condenado deberá comparecer en el tiempo máximo de diez días para determinar el ingreso en prisión.