El magistrado Carlos Gómez ha ordenado la busca y captura de la madame del 'caso Cursach'. La testigo protegido 31 de la macrocausa tendría que haber declarado la semana pasada como investigada. Sin embargo no compareció y se justificó en que no podía pagarse el viaje desde la Península, donde ahora reside, a Mallorca.
Tenía que declarar en torno a los duros informes policiales que desmontaban todo su relato y llegaban a la conclusión de que había fingido una agresión, además de mentir sobre la existencia del burdel que decía regentar.
El interrogatorio a la 31 había sido solicitado por varias acusaciones que quieren que responda sobre la presunta cobertura que dieron a esta pila de mentiras el juez Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán, los principales investigados en el Tribunal Superior. Tras su incomparecencia se pidió que fuera detenida y ahora, el magistrado ha cursado la orden a la Guardia Civil y la Policía Nacional.
Además, a la madame se le junta una orden de ingreso en prisión dictada por un juzgado de Palma por el impago de una multa que se le impuso por un falso testimonio y estafa. Como no abonó esa cantidad tendrá ahora que cumplir una reclusión de ocho meses.
El TSJB ya había localizado la investigada y, por lo tanto, su paradero es conocido.