Florence Chatelard, la conductora francesa que iba bebida y que fue condenada por el atropello mortal del policía local Biel Llull en Sineu, no se ha presentado voluntariamente en la cárcel de Palma, a pesar de que el día 5 expiraba el plazo para hacerlo. Ahora, y a la espera de que la jueza resuelva que no suspende la pena, se iniciará el trámite para que la mujer sea puesta en orden de busca y captura.
El accidente tuvo lugar en torno a las ocho menos veinte de la tarde del 14 de septiembre de 2016 en la carretera vieja de Sineu. La mujer conducía un Opel Corsa junto a su pareja después de haber consumido una gran cantidad de alcohol. A la altura del cruce de Lloret, la mujer se llevó por delante a Biel Llull, de 45 años, que circulaba en bicicleta con su hijo, que sufrió contusiones. El hombre, que trabajaba como policía local en Palma, falleció en el acto.
El juez Eduardo Calderón condenó a la conductora francesa a dos años y medio de cárcel por un delito de homicidio por imprudencia grave. La sentencia quedaba por debajo de los cuatro años que pedía la acusación particular, ejercida por el abogado Diego Wencelblat, y los tres años y nueve meses que reclamaba la Fiscalía porque se reconocen dos atenuantes a la acusada: uno de confesión por admitir los hechos en el juzgado de instrucción y otro por haber reparado el daño al haberse abonado las indemnizaciones solicitaban.
La Audiencia confirmó la condena y desestimó el recurso de la defensa de la acusada, que solicitaba que se rebajara la pena por el esfuerzo económico que realizó la mujer. El Supremo tampoco admitió el recurso.