Tòfol Tauler, el único sospechoso del crimen del joven desaparecido en sa Pobla en 2018, llevaba más de un día fallecido en el poblado de Son Banya, según fuentes de la investigación. La autopsia practicada este jueves en el Instituto Anatómico Forense de Palma ha revelado que murió por una posible sobredosis y descarta mano criminal. Los forenses encontraron diferentes tipos de drogas en el organismo. Los médicos enviarán las muestras a un laboratorio de análisis de estupefacientes, en Barcelona, y hasta dentro de unos meses no se conocerán los resultados.
Tòfol Tauler, de 39 años, fue detenido el 16 de enero de 2019 por la muerte de Mustapha El Karchaoui, de 26 años y origen marroquí, que desapareció en sa Pobla en 2018. La investigación de la Guardia Civil apuntaba a que el joven fue descuartizado y arrojado a s'Albufera. El cuerpo de la víctima nunca apareció a pesar de las laboriosas tareas de búsqueda.
El principal sospechoso negó su participación en la desaparición de El Karchaoui, pero la jueza de Instrucción 3 de Inca decretó su ingreso en prisión. Tauler solo contestó a las preguntas de su abogado, Miguel Ángel Ordinas, y reconoció que era consumidor habitual de cocaína, alcohol y anfetaminas. El detenido relató que había estado en tratamiento en Proyecto Hombre.
La Guardia Civil registró una finca de Muro, junto a s'Albufera, donde supuestamente estaría enterrado el cadáver del desaparecido. Dos perros adiestrados llegaron de la Península para buscar restos biológicos y una excavadora movió piedras de gran tamaño.
El cuerpo no apareció. La misma magistrada dejó en libertad al sospechoso nueve días más tarde bajo fianza de 3.000 euros. A finales de noviembre del año pasado el caso fue archivado por falta de pruebas.
Tauler tenía dos juicios pendientes: uno leve de amenazas, el 18 de febrero, y otro el 26 por robar una moto en sa Pobla. El fallecido contaba con más de seis causas abiertas en los juzgados.