Dos hombres, de 32 años de edad y nacionalidad española, se encuentran hospitalizados en Son Llàtzer tras recibir varias puñaladas y golpes con un martillo la madrugada del domingo en el barrio palmesano de La Soledat. Ambos se encuentran en la UCI y uno de ellos se debate entre la vida y la muerte debido a la gravedad de las heridas.
El Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía busca a los autores de la salvaje agresión entre los clanes de narcos de la zona. La principal hipótesis que manejan los investigadores es que las víctimas fueron a comprar droga.
Los dos varones que acabaron malheridos iban acompañados de una tercera persona, que avisó al 091 de lo que había ocurrido. También fue la que trasladó a sus dos amigos al hospital al comprobar la gravedad de las heridas. Regresó al lugar del suceso para contar a la policía lo que había ocurrido.
Los hechos ocurrieron poco antes de las 2.00 horas del domingo en la calle Teix de La Soledad. Las víctimas detuvieron su vehículo en doble fija para, según las primeras pesquisas, comprar droga. En momento dado se inició una discusión con un grupo de tres personas de etnia gitana. La cosa fue a más y el grupo acabópor coger un martillo y varias armas blancas. Los traficantes se abalanzaron sobre los supuestos ‘clientes'. Les asestaron puñaladas en distintas partes del cuerpo y golpearon sin piedad con un martillo. Acabaron huyendo del lugar a la carrera y siguen en paradero desconocido.
La principal línea de investigación con la que trabajan los agentes responsables del caso es que los presuntos agresores son integrantes de un conocido clan gitano que controla la venta, entrada y distribución de droga en la barriada palmesana. En los últimos tres meses, en la zona se han registrado varios episodios violentos.
Agentes de la Policía Nacional han intensificado la búsqueda de los sospechosos y no se descarta que se sean detenidos en las próximas horas.
Se teme por la vida de uno de los heridos
Los dos heridos siguen en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Son Llàtzer, de Palma, donde ingresaron el domingo. Uno de ellos se encuentra en estado crítico y se teme por su vida. Las próximas horas serán claves para conocer su evolución. El otro perjudicado, por su parte, fue sometido ayer a una operación y en cambio, aun siendo graves las heridas, su vida no corre peligro.