Un preso ha aceptado seis años de cárcel por violar a otro en el centro penitenciario de Palma en 2017. El acusado, de 23 años y nacionalidad española, indemnizará a la víctima con 1.565 euros por las lesiones y secuelas. El joven se ha declarado culpable de un delito de agresión sexual y otro de lesiones en un juicio celebrado esta lunes en la Audiencia Provincial de Palma. No se podrá comunicar ni aproximar al denunciante durante 10 años. El tribunal le impone, además, una multa de tres meses con una cuota diaria de 2 euros.
Los hechos se remontan a finales del mes de junio de ese año. El joven compartía la celda número 38 del módulo 5 con el perjudicado y le pidió mantener relaciones sexuales desde que llegó, pero este se negó. El 2 de julio, sobre las 16.00 horas, le volvió a solicitar tener sexo y ante la negativa de la víctima reaccionó de forma agresiva golpeándole y amenazándole. El agresor le dijo que si no accedía a sus deseos le haría la vida imposible en la prisión, tanto a él como a sus hermanos, que también se encontraban internos.
El acusado penetró a su compañero de celda y cuando acabó le dijo que si lo contaba le pasaría algo a él o a sus familiares. La víctima, atemorizado, optó por callar. Al día siguiente, alrededor de las 15.00, el procesado se acercó de nuevo al perjudicado para tener relaciones sexuales y este se negó. El joven le golpeó e iniciaron un forcejeo entre ambos hasta que los funcionarios del centro penitenciario de Palma se personaron en la celda y los separaron.
La Fiscalía reclamaba al principio una condena de 13 años de prisión por un delito de agresión sexual, otro intentado y uno leve de lesiones. El ministerio público ha llegado a un acuerdo con la abogada defensora del sospechoso y ha rebajado su petición.